Ante el alza de precios, Von der Leyen admite las limitaciones del actual diseño del mercado eléctrico y anuncia que la Comisión Europea trabaja ya «una reforma estructural» del mismo.
Bruselas trabaja en una «intervención de emergencia» y una «reforma estructural» del mercado eléctrico europeo. Así lo ha anunciado este lunes la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, ante «el aumento vertiginoso de los precios de la electricidad» que, según ha admitido, «está poniendo de manifiesto las limitaciones» del actual diseño.
Von der Leyen ha incidido en que el mercado eléctrico fue desarrollado «bajo circunstancias diferentes y con objetivos completamente diferentes» y, por ello, ya no es el más adecuado. «Por eso en la Comisión estamos trabajando ahora en una intervención de emergencia y una reforma estructural del mercado de la electricidad», ha explicado.
La presidenta de la Comisión se ha referido a la necesidad de estos cambios en el marco de la dependencia de la Unión Europea del gas ruso y la necesidad de reducirla ante la invasión rusa de Ucrania. En este sentido, ha advertido de que hay que prepararse «para una posible interrupción total del gas ruso».
No obstante, ha defendido que la UE ha logrado aumentar «a la velocidad del rayo» las importaciones de gas de otros proveedores y ha recordado la petición a los Estados miembros para que reduzcan un 15% su consumo para aumentar las reservas. Asimismo, ha argumentado que la mejor manera de liberarse de la dependencia energética de Rusia es acelerar la transición hacia energías verdes.
«La era de los combustibles fósiles rusos en Europa está llegando a su fin. Y con la liberación del chantaje vendrá un mayor poder para defender las reglas globales», ha aseverado la jefa del Ejecutivo europeo, que además ha puesto fecha a esa reforma del mercado eléctrico europeo, indicando que debe realizarse adecuada y técnicamente a principios del próximo año.
La reacción del Gobierno
Por su parte, el Gobierno ha celebrado el anuncio de Von der Leyen, recordando que el propio Pedro Sánchez venía reclamando esta reforma del mercado eléctrico europeo y que el presidente ya anunció a finales julio que España elevaría una propuesta de reforma a Europa ante los elevados precios de la energía.
En este sentido, las citadas fuentes ponen en valor el papel Sánchez al liderar este debate en el seno de la UE y lanzan un mensaje al PP, preguntando al principal partido de la oposición si va a defender los intereses de Europa o se opondrá como hizo la semana pasada con el decreto de ahorro energético.
A su vez, la vicepresidenta Teresa Ribera ha lamentado que Europa haya «perdido un año» para atajar los precios de la electricidad, aunque ha celebrado que Bruselas finalmente se haya abierto a intervenir el mercado eléctrico. «Es un movimiento interesante, aunque probablemente nos hubiera gustado haberlo visto hace un año», ha indicado la titular de Transición Ecológica, en declaraciones al canal ’24 Horas’.
Ribera ha destacado que es «importante» intervenir con medidas excepcionales en un momento excepcional. «No podemos dejar pasar la necesidad de intervenir en el mercado eléctrico, que está roto», ha sentenciado.
Reunión de la UE sobre los precios de la energía
Por otra parte, la presidencia de la Unión Europea ha convocado para el próximo 9 de septiembre una reunión extraordinaria de los ministros de Energía para abordar la fuerte subida de los precios y una posible intervención política en los mercados, según ha anunciado también este lunes el primer ministro checo, Peter Fiala.»Se ha llegado a un consenso sobre la necesidad de meter los precios en la arquitectura de la energía en la UE», ha afirmado, tras reunirse con su homólogo alemán, Olaf Scholz.
El mandatario checo ha recordado que hasta hace poco entre los socios comunitarios dominaba el rechazo a intervenir en el proceso de formación de precios, algo que ha cambiado tras su fuerte encarecimiento, que ha creado una «situación insostenible». Lo que ha pasado en los pasados días y semanas hace necesaria, tanto para Berlín como para Praga, «algún tipo de intervención», ha reconocido Fiala, que ve posible un «desligamiento de los precios de la electricidad de los precios del gas».