Los diferentes líquidos de la parte mecánica de un coche tienen un uso limitado. La gasolina, el aceite, el líquido de frenos… requieren unos tiempos que deben ser controlados por el conductor.
Durante estos días de confinamiento en casa, nuestro coche va a estar mucho tiempo parado en el garaje o en la calle. Más allá de realizar una serie de tareas de mantenimiento en el vehículo, así como de realizar una profunda limpieza y desinfección, hay otros detalles que hay que tener en cuenta.
¿Sabías que los componentes líquidos del motor, como el combustible, el aceite o el líquido de frenos tienen una fecha de caducidad? Eso sí, antes de resolver esta cuestión, no te alarmes así de primeras: el período de Estado de Alarma, confiemos, no se alargará lo suficiente como para que tengas que preocuparte por ese asunto. Aun así, no está de más tener estos conocimientos.
GASOLINA EN EL DEPÓSITO, ¿SE ESTROPEA?
Si vas a dejar el coche parado durante varios meses, o tienes un vehículo híbrido enchufable o de gas y te vas a mover siempre con electricidad o el correspondiente gas (respectivamente), debes saber que el combustible que se queda almacenado en el depósito tiene un período recomendado de uso para que no pierda propiedades y no termine afectando a nuestra mecánica.
El Área de Movilidad del Centro de Tecnología Repsol nos dio hace poco las claves sobre el proceso de degradación de los combustibles: la “oxidación de los hidrocarburos” viene causada por su propia “composición, el paso del tiempo, la presencia de oxígeno, la incidencia de la luz, el sometimiento a altas temperaturas y la presencia de metales que actúan como catalizadores de las reacciones de oxidación”.
La explicación en esta dirección nos la da Total. La compañía energética nos cuenta que, al igual que el combustible, los lubricantes almacenados durante mucho tiempo también pierden propiedades con el paso del tiempo: “los aditivos pueden separarse y depositarse en el fondo del envase”, mientras que la humedad del aire también “puede echar a perder el producto. Un aceite mezclado con agua no lubricará”.
Los envases de aceite para el coche, no obstante, no tienen una fecha de caducidad propiamente dicha. Desde Total recomiendan no utilizar estos lubricantes en un tiempo máximo de cinco años desde su fabricación (ojo, no desde su compra). Para el líquido de frenos, importante para la seguridad de nuestro vehículo, no es aconsejable utilizarlo dos años después de la apertura del envase.
Total recomienda comprar “siempre la cantidad de producto que sepas que vas a consumir”, y que sean siempre “productos de calidad y adaptados a tu vehículo dentro de los períodos recomendados por su fabricante”. La compañía invita a sus clientes a ponerse en contacto con ellos si tienen alguna duda al respecto de un envase almacenado durante mucho tiempo. Y recuerda: para deshacerse de este tipo de productos, llévalo al punto limpio adecuado.