Los operadores independientes son un agente clave de los mercados y de la transición energética
¿Cómo entendemos la descarbonización de la energía?
Como punto de partida, conviene recordar que, desde UPI, entendemos que esta transición energética tiene que estar basada en dos grandes principios: por un lado, el equilibrio entre descarbonización, competitividad/accesibilidad y seguridad de suministro, es decir la búsqueda de una sostenibilidad global; por otro lado, la neutralidad tecnológica que el proceso necesita indefectiblemente.
¿Qué es la neutralidad tecnológica y porqué es imprescindible para una transición energética óptima?
Consiste en no favorecer artificialmente ninguna tecnología por encima de las demás, dejando que compitan entre ellas para alcanzar el objetivo de la neutralidad climática en 2050 y los objetivos intermedios. La neutralidad tecnológica implica necesariamente tener en cuenta todas las emisiones de los ciclos de vida de nuestra economía ya que solamente así, se puede controlar y conocerla contribución real de cada tecnología a la reducción de emisiones de gases de efectos invernadero en la medida en que ese efecto invernadero es la suma de emisiones a nivel mundial.
Neutralidad tecnológica conlleva pues competencia y promueve la competitividad y la energía asequible (lo que es una transición justa), que existan diversidad de opciones para que los particulares y las empresas puedan elegir las que más se adapten a sus necesidades y capacidad económica, que esta diversificación y, por lo tanto, mayor seguridad de suministro, que exista la investigación, desarrollo e innovación.
En este marco, desde UPI, proponemos y defendemos como una vía más de descarbonización, la opción de los ecocombustibles, combustibles líquidos bajos o neutros en carbono que no son de origen fósil, que no exigen renovación del parque automovilís1ico ni despliegue de puntos de suministro y que conforman una oferta que responde a todas las necesidades de movilidad del conjunto de particulares con mayor o menor capacidad adquisitiva y sectores económicos, en términos de coste y prestaciones.
Para los gobiernos y administraciones públicas entendemos que los ecocombustibles son una opción a tener en cuenta por su capacidad de descarbo nización y por sus ventajas para la economía y el empleo, el mantenimiento y desarrollo del mundo rural en un marco de economía circular y la independencia energética. Además, los ecocombustibles son imprescindibles para no ralentizar el proceso de descarbonización y alcanzar el objetivo obligatorio de la UE para 2030 del 55 por 100 de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
El Pacto Verde europeo que traza una hoja de ruta dirigida a alcanzar una economía neutra en carbono en el año 2050, consagra la neutralidad tecnológica como una base fundamental para lograr una energía que además de limpia, sea segura y asequible. En cambio, la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética no contiene ninguna referencia a la neutralidad tecnológica.
Desde UPI, apelamos a la responsabilidad de los gobiernos y de las administraciones públicas en la toma de las decisiones relativas a la transición energética, reconociendo la neutralidad tecnológica como un eje fundamental y llevándola realmente a la práctica con acciones eficaces y eficientes. En este sentido, podemos dar dos ejemplos de la necesidad de reconducir la transición energética por la senda de la neutralidad tecnológica: el primero son los estándares europeos de emisión de CO2 de vehículos ligeros y pesados y el segundo, las ayudas nacionales a la renovación de flotas profesionales.
¿Qué aportan los operadores independientes a la transición energética?
Los operadores independientes son un agente clave de los mercados y de la transición energética. En tanto que no son productores, no arrastran tantos activos que condicionen su reconversión y diversificación energética si bien por otro lado, muchas veces dependen de las decisiones que tomen los productores. Además, los operadores independientes son garantes de la existencia de competencia efectiva en los mercados en los que están posicionados, dinamizando de esta manera la transición energética. Contribuyen también a la diversificación y seguridad de suministro. Esta función cobra aún más importancia a la hora de buscar nuevas fuentes de abastecimiento de combustibles alternativos.
En concreto, los operadores independientes aportan a la transición energética propuestas y compromiso, un riguroso cumplimiento de la normativa, polí1icas empresariales de sostenibilidad e inversiones.
Los operadores independientes procuran la máxima sostenibilidad de sus procesos operativos de almacenamiento y transporte: las grandes terminales de almacenamiento incorporan los úl1imos avances tecnológicos y cuentan con los más exigentes certificados de calidad en seguridad, tratamiento y control del producto y estándares medioambientales (reducción de emisiones de CO2 y eficiencia energética) así como con capacidad de almacenamiento y mezcla de diferentes tipos de biocarburantes, incluido HVO.
Estos certificados reflejan un modo de vida empresarial lo más amigable posible con el medioambiente que incluye prácticas o gestos que suman en ese sentido desde racionalizar y monitorizar consumos, instalar placas fotovoltaicas, escoger el origen de la electricidad suministrada, uso de elementos de bajo consumo y reciclados, concienciación del personal, reducción de residuos, etc. También existen proyectos de huella de carbono negativa, consistentes en reducir las emisiones de gases de efecto invernadero más de las que se generan con las actividades desarrolladas, principalmen1e invirtiendo en la producción y comercialización de energías renovables y alternativas.
Por su parte, las flotas de transporte cumplen todas las exigencias legales y cuentan también con certificados de calidad. En cuanto a las estaciones de servicio, al estar enfocadas a ser un lugar de acogida y servicio a los particulares y profesionales en desplazamiento, con una oferta múltiple de bienes y servicios energéticos y de conveniencia, se ofrecen espacios gratos y sostenibles. Entre otras actuaciones, cabe destacar el desarrollo del autoconsumo de electricidad mediante la instalación de paneles.
En el futuro, nuestras inversiones irían encaminadas a cometer las mínimas adaptaciones que la actual infraestructura requiere para el suministro de los combustibles alternativos.
Los operadores independientes cumplen escrupulosamente toda la normativa de introducción de energías renovables y de reducción de emisiones de GEI de los combustibles y energía comercializados. Lo hacen a la vez que compiten con un modelo de negocio, el de los operadores con capacidad de refino, que habitualmente se encuentra en ventaja competitiva por el impacto diferenciado de las nuevas obligaciones legales que se van imponiendo en el marco de la transición energética.
Los operadores independientes llevan ya años diversificando su cartera de negocios hacia energías alternativas y servicios energéticos: biocombustibles, generación de electricidad renovable, comercialización de electricidad, recarga eléctrica, GNL, GNC y GLP, pellets, etc.
A través de UPI, el colectivo independiente participa en la Plataforma para la Promoción de los Ecocombustibles junto con otras asociaciones y sectores en defensa de la neutralidad tecnológica y del reconocimiento real de los ecocombustibles como opción de descarbonización al mismo nivel que la electricidad. Asimismo, nuestra Asociación europea UPEI acaba de publicar su Visión revisada para 2050: UPEI Reviewed 2050 Vision donde ofrece un análisis actualizado de los retos del modelo energético, una propuesta para alcanzarlos y su compromiso de cooperación.
oilgas I marzo 2023