Berlín acepta que Bruselas prohíba los motores de combustión a partir de esa fecha a cambio de que se puedan seguir matriculando «si repostan exclusivamente con carburantes neutros en emisiones de CO2»
Qué son los e-fuel que permitirán los coches de combustión más allá de 2035
La Comisión Europea ha anunciado que ha llegado a un compromiso con el Gobierno alemán para incluir a los motores de explosión que usen combustibles sintéticos en la lista de los vehículos que podrán ser vendidos a partir de 2035. El acuerdo fue avanzado en redes sociales por el vicepresidente de la Comisión encargado de la transición energética, Frans Timmermans que ha dicho que a partir de ahora «trabajaremos para que se adopten los estándares de CO2 para automóviles lo antes posible, y la Comisión hará un seguimiento rápido con los pasos legales necesarios para implementarlo».
La legislación que prohibirá las ventas de automóviles nuevos que usan combustibles fósiles a partir de 2035 es la parte más importante del ambicioso plan de la UE para ser una economía neutra en materia de emisiones a partir de 2050. Sin embargo, en el último momento, Alemania primero e Italia y otros países después expresaron dudas sobre la conveniencia de prohibir tajantemente la matriculación de coches con motores de explosión.
El Gobierno alemán en concreto le pidió al ejecutivo comunitario que dejase abierta la posibilidad de que sobrevivan los coches con motores tradicionales si utilizan combustibles sintéticos producidos con fuentes de energía renovable.
El ministro de Transporte alemán, Volker Wissing, que en los últimos días había sido muy pesimista sobre las posibilidades de resolver este dilema, dijo ayer, también en redes sociales, que con este acuerdo con la Comisión los vehículos con motores de combustión podrían seguir matriculándose después de 2035 si solo utilizan combustibles que sean neutros en sus emisiones de CO2.
Los combustibles sintéticos todavía están en una fase de desarrollo pero los fabricantes alemanes esperan que permitirán en el futuro seguir usando motores de combustión sin producir emisiones nocivas para el medio ambiente y el clima. La semana pasada se filtró una propuesta de la Comisión que prevé, en efecto, la posibilidad de que se autorice la venta y matriculación de coches con motor de explosión siempre que estén dotados de un sistema que permita saber si están usando realmente combustible sintñetico y que no puedan funcionar en ningún caso con gasolina procedente de hidrocarburos fósiles.
Los expertos aún no se han puesto de acuerdo sobre si los vehículos propulsados por combustibles sintéticos pueden competir en un mercado contra los autos eléctricos que se espera que se abaraten con el tiempo, aunque otros creen que pueden ser una buena fórmula como tecnología de transición.
Si la posición actual de la Comisión complace a Alemania, Italia, Polonia y Hungría, se espera que el resto de los países esté de acuerdo con la solución que ha planteado Timmermans para salvar a los motores de explosión. La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha calificado esta propuesta como «una buena noticia» que permitirá «desatascar» la situación y «seguir avanzado». El objetivo de la UE es reducir a cero las emisiones de CO2 de los vehículos nuevos.