El CEO de Porsche, Oliver Blume, ha declarado que ve a los e-fuels como una solución complementaria a los coches eléctricos y ha comentado el precio que podrá alcanzar si se escala a nivel industrial.
Con 2035 como claro horizonte enla descarbonización de la oferta comercial en Europa, los fabricantes de automóviles han de desarrollar gamas de coches eléctricos que de manera paulatina comiencen a adaptarse a las necesidades de cada cliente (especialmente en la vertiente del precio). Además de coches eléctricos, Porsche es el fabricante que más fuerte está apostado por los combustibles sintéticos, los denominados ‘e-fuels’, una solución que en la firma ven como una solución complementaria a los eléctricos puros. Sobre ello ha hablado recientemente su CEO, Oliver Blume.
El directivo, de origen alemán, es uno de los artífices del gran estado de forma económico en el que se encuentra la firma de Stuttgart. Atendiendo a movilidad eléctrica, el propio Blume ha calificado al Porsche Taycan como un coche eléctrico ‘a la altura del 911’. Prueba de ello son sus ventas, que superaron la cota de las 40.000 unidades el año pasado, y que da alas a la compañía para seguir avanzando en este sentido.
Porsche espera que el 80 % de sus ventas en 2030 se correspondan con coches eléctricos, pero también espera que el combustible sintético tenga un gran peso en sus planes del futuro, y ha declarado que lo ve como ‘una solución complementaria’ a los coches eléctricos por baterías. De hecho la UE ha dejado abierta la posibilidad a este tipo de combustibles más allá de 2035 siempre y cuando no lancen emisiones a la atmósfera.
Además de esto último, también es importante que allá donde se produzca este tipo de combustibles abunden las energías renovables, por lo que la energía extra necesaria para producir combustibles sintéticos con respecto a otro tipo de carburantes y energía sea irrelevante. En este sentido Porsche ya se encuentra trabajando, y ya tiene en marcha un proyecto piloto en una planta de producción de e-fuels en Chile en la que se registran recurrentemente rachas de viento de hasta 120 kilómetros por hora.
A partir de este año, se espera que la planta piloto produzca unos 130.000 litros de e-fuels al año. Porsche adquirirá este volumen en su totalidad e inicialmente lo destinará, sobre todo, a su uso en competición. Más adelante, Porsche tiene pensado utilizar estos combustibles sintéticos en sus modelos con motor de combustión, incluidos los clásicos.
Y es que, una de las ventajas de este tipo de combustibles es que serán válidos para automóviles fabricados para usar combustibles tradicionales. De hecho Porsche ya ha probado su propio ‘e-fuel’ con conductores ajenos a Porsche en las primeras pruebas dinámicas del Porsche Cayman GT4 RS.
Además de declarar que lo ve como una tecnología destinada a complementar a los eléctricos puros, Blume también ha dicho cuanto cree que costará cada litro de combustible sintético en el futuro.
“Esto dependerá del nivel de producción que haya en el futuro. Si se hace a escala industrial, será posible alcanzar un precio inferior a 2 dólares por litro. Lo importante es que los combustibles sintéticos se fabriquen de manera sostenible y en lugares del mundo donde abunde la energía renovable, de tal manera que el aporte extra de energía para la producción sea irrelevante. Los e-fuels producidos a partir del agua y el dióxido de carbono extraído del aire, con aplicación para automóviles, aviones y barcos, tienen la ventaja sobre el hidrógeno puro de que pueden transportarse más fácilmente”.
Actualmente, pensar en un precio de 2 euros por litro de carburante como solución a largo plazo no parece del todo una mala idea, sobre todo teniendo en cuenta que en muchas zonas de España el precio de combustible rebasa ya ampliamente la barrera de los dos euros.